Este piso de unos 150 m2 útiles, situado en una de las mejores y más emblemáticas calles de Bilbao tenía un aire clásico y mucha luz natural.
Un piso con techos altos, con molduras en los techos y suelos macizos de madera noble.
Las necesidades de nuestros clientes eran muy claras: mantener al máximo la esencia y carácter de la vivienda y crear divisiones más fluidas y funcionales, con muchísima luz natural, siempre con un toque de elegancia y glamour.
El suelo de madera inicial se restauró, se cepillo y se trató con un acabado satinado.
En el proyecto, el arquitecto dividió la vivienda en dos partes muy bien delimitadas, la zona de día y la zona de noche.
La zona de día cuenta con hall, comedor, cocina y un gran salón con zona de despacho con un concepto totalmente abierto.
La zona de noche está separada de la de día con una puerta ciega y consta de un gran dormitorio principal con un gran vestidor y un gran baño en suite, otros dos dormitorios y otro baño, y por ultimo un pasillo ancho donde se diseñó un armario a medida para la ropa blanca y accesorios.
La arquitectura interior se resolvió con grandes molduras y frisos, rica en escayolas XXL con un diseño muy limpio y lineal, reinventando el aire clásico inicial pero con líneas más contemporáneas.
La combinación de elementos, mobiliario y objetos que destacan por su grandeza y carácter en formas geométricas marcadas y brillos metalizados, se entremezclan otros con maderas naturales y lacas en colores neutros, beiges, blancos arenados, blancos y negros de líneas limpias.
El mobiliario de la cocina bicolor consta de una línea de armarios contra una de las paredes con puertas lisas en laca blanca en contraste con una isla rematada con un friso en color gris arena con dos balaustres a cada lado pintados del mismo color, donde destacan los detalles en dorado como el grifo y el fregadero. Las encimeras y el entrepaño son de Calacatta Gold.
La decoración con espejos grandes, muebles con motivos geométricos con acabados en espejo en color bronce, toques negros y dorados y mármoles destacan haciendo un giño al estilo Art Decó.
El arte está presente en todos los espacios tanto en forma de cuadros como de esculturas estratégicamente colocadas, alejándonos de la discreción clásica y buscando una llamada de atención visual que provoca reacciones emotivas en una versión moderna.
El dormitorio principal en suite tiene la esencia del glamour de Hollywood de los años 20, con un cuadro de la revista Vogue coronando el cabecero con el perfil en blanco y negro de Audry Hepburn como icono de la elegancia; y junto con las fotografías en blanco y negro del vestidor dan el toque artístico y visual.
La cama y el pies de cama en terciopelo azul grisáceo, son el centro de atención del espacio del dormitorio, con el diván y el puff en los mismos acabados a un lado de la estancia, todos ellos diseñados a medida, estos últimos separados por un espejo barroco de anticuario de gran tamaño.
El resto del mobiliario, tanto las mesitas de noche como las cómodas están lacadas en negro con puertas y patas en dorado alto brillo al estilo Art Decó. En la entrada del dormitorio se encuentra un gran vestidor con puertas en laca blanco y grandes espejos que reflejan tanto la luz como las fotografías en blanco y negro y la puerta del baño situados en la pared frontal.
En el baño principal se crea un efecto visual de simetría, donde la bañera exenta de gran tamaño preside la estancia haciendo de separación de la zona de ducha y la zona del inodoro por un lado, y los dos muebles de lavabo por el otro.
El mármol en blanco y negro de los revestimientos de suelo y paredes, entra en contraste con los muebles de lavabo con formas redondeadas lacadas en negro y puertas doradas con relieve en líneas rectas. Los grandes espejos con formas geométricas y los cierres de vidrio de la zona de ducha y zona del inodoro completan este aura de elegancia y glamour.
La iluminación es crucial para crear la atmósfera adecuada en la vivienda. Los apliques de mármol de estilo Art Decó crean dibujos que dan mucho dinamismo al hall, cocina, comedor y al salón; las dos lámparas de techo que destacan en el salón también crean dibujos con formas geométricas en las paredes.
Las lámparas de techo sobre la isla de la cocina, de formas geométricas marcadas y con materiales como el dorado, cristal y el mármol le dan ese toque de extravagancia del estilo Art Decó.
El mueble suspendido de la televisión, diseñado a medida, incorpora una tira led para iluminar sutilmente y crear un ambiente íntimo en el salón.
La iluminación general de la zona de día, se resolvió con barras lineales blancas de superficie de led ubicadas en paralelo a las grandes molduras del techo creando formas lineales y geométricas y delimitando visualmente cada espacio.
La iluminación general en la zona de noche se resolvió separando la moldura de las paredes e iluminando el perímetro del espacio con tiras de led dando más protagonismo al detalle de la moldura.
Las lámparas de techo colgadas sobre cada mesita de noche del dormitorio principal en dorado y bola de cristal, el aplique a juego de la zona del diván junto con los apliques con los mismos acabados del baño también tienen el sello distintivo del estilo Art Decó.
En definitiva, en Orue proiektuak eta erreformak proyectamos y diseñamos un hogar acogedor, funcional y con mucha luz natural, con una atmosfera sofisticada, elegante y con un toque de glamour con materiales nobles y atemporales; y con detalles artísticos con un toque extravagante que interactúan con los espacios y guían nuestra mirada.